Frecuentemente me preguntan que cuántos años tengo... ¡Qué importa eso! Tengo la edad que quiero y siento. La edad en que puedo gritar sin miedo lo que pienso. .
Hacer lo que deseo, sin miedo al fracaso, o lo desconocido. .
Tengo la experiencia de los años vividos y la fuerza de la convicción de mis deseos. ¡Qué importa cuántos años tengo! . Tengo la edad en que las cosas se miran con más calma, pero con el interés, de seguir creciendo. . Tengo los años en que los sueños se empiezan a acariciar con los dedos, y las ilusiones se convierten en esperanza. .
Tengo los años en que el amor, a veces es una loca llamarada, ansiosa de consumirse en el fuego de una pasión deseada, y otras es un remanso de paz, como el atardecer en la playa. .
¿Qué cuántos años tengo? No necesito marcarlos con un número, pues mis anhelos alcanzados, mis triunfos obtenidos, las lágrimas que por el camino derramé al ver mis ilusiones truncadas, ¡Valen mucho más que eso!. Qué importa cuántos años, ¿cuantos tengo o cuantos espero?. Si con los años que tengo, aprendí a querer lo necesario y a tomar solo lo bueno.
Cuidando la mente y el físico se envejece más lentamente.
ResponderEliminarFrecuentemente me preguntan
ResponderEliminarque cuántos años tengo...
¡Qué importa eso!
Tengo la edad que quiero y siento.
La edad en que puedo gritar
sin miedo lo que pienso.
.
Hacer lo que deseo,
sin miedo al fracaso,
o lo desconocido.
.
Tengo la experiencia de los años vividos
y la fuerza de la convicción de mis deseos.
¡Qué importa cuántos años tengo!
. Tengo la edad en que las cosas
se miran con más calma,
pero con el interés,
de seguir creciendo.
.
Tengo los años en que los sueños
se empiezan a acariciar con los dedos,
y las ilusiones se convierten en esperanza.
.
Tengo los años en que el amor,
a veces es una loca llamarada,
ansiosa de consumirse en el fuego
de una pasión deseada,
y otras es un remanso de paz,
como el atardecer en la playa.
.
¿Qué cuántos años tengo?
No necesito marcarlos con un número,
pues mis anhelos alcanzados,
mis triunfos obtenidos,
las lágrimas que por el camino derramé
al ver mis ilusiones truncadas,
¡Valen mucho más que eso!.
Qué importa cuántos años,
¿cuantos tengo o cuantos espero?.
Si con los años que tengo,
aprendí a querer lo necesario
y a tomar solo lo bueno.